CATEQUECIS PARA ADULTOS
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Hay una renovación de la catequesis de adultos, recientemente debido a exigencias del catecumenado y el cambio de sociedad.
El sentido de la catequesis en el N.T. se entiende como la instrucción bautismal a los catecumenos y que es la transmisión viva de la revelación cristiana, dirigida a adultos convertidos, a los que se preparan para el bautismo, y a comunidades de creyentes bautizados.
La enseñanza cristiana primitiva fue catequesis bautismal porque en un primer momento se exponía el misterio cristiano y luego se les bautizaba como iniciación integral al contenido de la fe o a la exigencia cristiana.
Existe una decadencia de la catequesis de adultos en el siglo V porque hay una disminución del bautismo de adultos y aumento de bautismos en niños. Así la catequesis es instrucción de niños después de ser bautizados. En la edad media la educación se centra en niños y adolescentes y el pueblo cristiano recibe formación a través de la predicación.
En el siglo XVI la catequesis se renovó impulsada por la reforma y decisiones del concilio de Trento que a partir de ese momento procuro que se impartiera instrucción catequética a los adultos en la misa de los domingos.
Solamente en las tierras nuevas descubiertas se da una catequesis de adultos para catecúmenes que se van a bautizar.
A la vez las misiones populares intentan renovar la formación en los siglos XVII hasta el Vaticano II. La predicación ordinaria y extraordinaria es el medio de educación religiosa de adultos hasta el siglo XX. La renovación moderna de la catequesis de adultos se produce después de la segunda guerra mundial, porque se empiezan a desarrollar cursos, escuelas de catequesis, reuniones etc.
Debido a la situación de la catequesis de adultos que se encuentra en abandono, algunos países comienzan a hacer gestiones para expandir la catequesis de adultos que desean actualizar su fe, (Holanda, Alemania).
En la actualidad no toda la catequesis de adultos va dirigida a la catequesis de iniciación aunque suele ser así, por ejemplo hay catequesis de adultos pre-sacramental, catequesis de formación, catequesis compromisial.
Para Juan Pablo II la catequesis de adultos es la forma principal de catequesis porque esta dirigida a personas que tiene mayores responsabilidades y capacidad de vivir el mensaje cristiano bajo su forma desarrollada.
Se pueden distinguir dos modalidades de catequesis de adultos que responden a dos necesidades:
1ª fundamentación básica de la fe dirigida a bautizados que no han tenido una debida iniciación
Y 2ª la consolidación de fundamentos para afianzar la fe.
El Vaticano II señala que la finalidad de la catequesis de adultos es hacer activa la fe, hacerla viva que se fundamente en la Sagrada Escritura, en la Tradición, en el Magisterio, en la Liturgia y en la vida de Iglesia.
La catequesis de adultos de caracteriza por ser individual, porque atañe a todos los aspectos de su ser individual y colectiva porque es global respecto de su centro constituido por el mensaje cristiano radical que es el evangelio y Jesucristo. El catequista debe ayudar a descubrir la Buena Nueva en su vida. El destinatario de la catequesis de adultos es cualquiera que desee reinterpretar la vida entera y dar sentido a su existencia a partir del acontecimiento de Jesucristo. El lugar en que se da esta catequesis de adultos es la comunidad entera.
Es importante comprender algunos rasgos esenciales, como por ejemplo desentrañar quién es el adulto. Sin duda el adulto es una persona con cierto grado de madurez que tiene experiencia y que se encuentra en un proceso de crecimiento. Es importante mantener una actitud de prudencia para dialogar con los adultos porque hay que tener en cuenta que el otro hay una persona que arrastra consigo una personalidad y que tiene una libertad que hay que respetar..
También es necesario tener en cuenta que suele encontrarse frente a una negación del hecho religioso, la aceptación desganada de unas creencias frecuentemente parciales. Hay adultos mas o menos cristianos que rechazan ciertos dogmas mal conocidos, mezclados y confundidos. Esto sucede porque convivimos con personas agnósticas o indiferentes al hecho religioso que cuestionan profundamente la fe de muchos cristianos.
Existe una crisis de fe adulta porque se requiere de una actitud humilde, y hay pobreza para reconocer que Dios es lo único que nos conduce hasta la plenitud, en la línea de salvación liberadora.
Existen algunos modelos de catequesis de adultos:
- catequesis como instrucción religiosa, este modelo enseña la doctrina cristiana de los catecismos y tratados teológicos, es decir dogmas, se trata del credo; moral, enseñanza de los mandamientos: y del culto, enseñanza de los sacramentos.
En este modelo se prioriza la enseñanza y el catequizando es un objeto que se moldea.
b)Catequesis como educación personal cristiana, aquí se pone énfasis en la persona, y no en la doctrina, en la conducta y no en el saber. El maestro es un educador de actitudes, comportamientos y conciencias. El aspecto doctrinal tiene cabida como servicio de la personalización de la fe, de manera que la fe se torne viva y sea aclarada por la doctrina.
c)catequesis como proceso cristiano de liberación, Aquí se tiene en cuenta la situación social del pueblo, se pone énfasis en el compromiso a través de la opción por los pobres y el objetivo es que los catequizando sean activos y críticos en la Iglesia y en la sociedad como un agente de transformación. |
